Recuerdo el día que nos conocimos. Corriste por el pasillo
gritando, "¡Mami! ¡Mami! ¡¿Qué hay en la bolsa ?!"
Sonriendo, ella te entregó lo que resultaría ser tu mejor
amigo por el resto de tu vida.
De día y de noche, pasaste cargandome ... viendo películas,
escribiendo en tu diario, hablando por teléfono.
Sin darme cuenta, luchaba contra los monstruos que
intentaban apartarme de ti.
Me sentaba al final de tu cama todas las noches, esperando
cuando me necesitarás nuevamente.
Los monstruos debajo de tu cama se iban, y los demonios de
tu armario nunca se acercaban a ti.
Fuiste mi todo, me abrazabas y me amas incluso cuando
estabas llena de lágrimas.
Con los años, me abrazaste y me amaste cada vez menos, y lo
entiendo. Ahora eres una niña grande y yo solo soy parte de tu infancia.
Yo seguí luchando contra los monstruos en tu armario y
debajo de tu cama, a pesar de que me estoy descosiendo por los bordes.
Sigues siendo mi todo
El día que más recuerdo fue cuando te enfrentaste a un
monstruo que no pude defenderte.
Sonreías cada vez menos, tu cuerpo brillaba cada vez menos,
y con el tiempo tu pelo comenzó a verse como el mío ... Todo parcho y cayéndose
cada día. No pude evitar llorar el día que me desempolvaste y me llevaste a tu
cama.
Apenas te reconocí por lo que ese monstruo te había hecho.
Después de años de amistad, empecé a fallar, como protector
y como amigo.
Cuando te llevaron al hospital, no me dejaste ir. Tu agarre
sobre mí se hizo menos constante ... Ya no podías levantarte de la cama.
Lloraste, junto con mami cuando le dijiste. "Por favor,
entiérrame con Teddy". Es fue lo que destruyó mi orgullo y me di cuenta de
que el final estaba cerca.
Tosías, esa tos terrible, jadeando por cada aliento de aire
cuando este monstruo daba sus últimos golpes.
La enfermera me tiró de la cama en su desesperado intento de
calmar la tormenta, y solo pude mirar con horror cuando me di cuenta de que no
me quedaban fuerzas para alcanzar tu mano.
Lo último que recuerdo es cuando me buscabas. Quería gritar
de agonía y terror cuando vi a mi mejor amiga desaparecer.
Tomaste tu último aliento en ese momento y tu monstruo
finalmente ganó.
Lo siento mucho mi querida Sally. Te he fallado y dejé que
ese monstruo ganara.
Mami me devolvió a tus brazos el día que te enterraron y no
pude evitar llorar.
Mi querida mejor amiga, Sally. No estoy lejos de ti.
Tu mejor amigo, tu protector, tu Teddy. Va en camino.
Por favor perdoname.
Comentarios
Publicar un comentario